Hoy, día 21 de marzo, celebramos el día del género más sublime de la literatura, y sin embargo, el menos apreciado y el menos leído: la Poesía.
¿Es cosa del pasado la poesía? No diremos nada nuevo al afirmar que, si ya es difícil vivir de la literatura, resulta ciertamente imposible vivir de la poesía. Pienso en poetas españoles contemporáneos: los primeros que acuden a mi mente, de forma atropellada, tienen como ocupación el periodismo (Andrés Trapiello), la empresa (Josep Lluís Aguiló), la docencia (Francisco Díaz de Castro, Guillermo Carnero) o han estado en un cargo público (Luis Alberto de Cuenca, Pere A. Martorell). O incluso está el caso del gran Vicente Gallego, que hasta donde yo sé, trabajaba en una planta de reciclaje.
No se vive de la poesía
Eso está claro. La poesía, si acaso, se vive. Y esto es algo que tenemos que transmitir.Como profesor en Secundaria, puedo ser testigo de cómo los chicos van perdiendo (así, en general, porque siempre hay excepciones) su creatividad y su originalidad para acabar asimilando una especie de mentalidad mercantilista y pragmática que, desgraciadametne, la enseñanza sigue transmitiendo. Si a eso le unimos el poco interés que suscita de por sí la poesía (quiero decir, sin el resorte que pueda causar algo o alguien que la haga más atractiva), ésta no tiene nada que hacer contra todos los cantos de sirena que oye un adolescente hoy en día.
Y sin embargo, en muchas de las ocasiones en las que he creado poesía con los alumnos he obtenido resultados geniales. Incluso con esos alumnos etiquetados como “de necesidades educativas especiales”. Ellos mismos son los primeros sorprendidos por los resultados. La semana pasada, por ejemplo, leí a los alumnos de 4º unos haikus que habían hecho ellos mismos en 2º, sin decirles quiénes eran los autores. Muchos sólo los recordaban vagamente, y ahora, con la distancia del tiempo, los disfrutaron y apreciraon, ¡sin saber que eran suyos!
La poesía se deja conocer a aquellos que se acercan a ella
Uno de los problemas es que dicen que se entiende poco. ¿Es difícil de entender o es simplemente falta de una lectura atenta? Está claro que hay infinitos tipos de poesía, unas más sencillos de entender, y otras más opacas, debido a su uso de la lengua, las metáforas o las referencias culturales. No es lo mismo leer a los poetas de la experiencia que a un autor barroco. Pero en el fondo, creo que uno de los problemas del rechazo a la poesía es su lectura superficial. La poesía es el arte de concentración, de la selección exacta de las palabras. Con poco se dice mucho. Y esa condensación necesita muchas veces de un esfuerzo lector, una forma de encarar el texto diferente a la de una novela o cualquier otro tipo de texto. Hay que paladear cada palabra, dejarse llevar por el torrente de imágenes, pero sobre todo leer y releer con atención.¿La poesía es como el arte moderno, sólo al alcance de unos pocos?
No lo creo. Es cierto que es la hermana fea de la literatura, con la cual nadie quiere bailar. Las colecciones de poesía escasean, y si preguntáramos al ciudadano de a pie, es probable que pocos pudieran citar más de un poeta vivo. La poesía no vende, no es comercial, porque lleva a un compromiso con el lector: el de esforzarse en su lectura, imaginar, vivir esa poesía, y no sólo leerla como se lee el periódico.Es cierto que a veces habréis encontrado poesía que no se entiende, os lo concedo. Pero me gusta pensar que hay poesía que es como un cuadro abstracto; no es necesario entender todas las palabras, o descifrar un mensaje oculto en las metáforas, para dejarse llevar o disfrutar de su sonoridad. Al igual que al arte moderno, a veces no entendemos un cuadro, pero sabemos que nos gusta o no nos gusta, que nos provoca una sensación. Para mí esto es la poesía: no es sólo la búsqueda de la belleza (acaso lo fue, pero ahora no es sólo eso), sino de la emoción, de crear impresiones en el lector.
Y es que la poesía no está tan sólo dentro de las páginas de un libro, poesía la hay en todas partes, constantemente a nuestro alrededor. Poesía es un estado anímico, me atrevería a decir. Poesía es todo. Poesía… eres tú, decía nuestro amigo Bécquer. ¡Feliz Día Mundial de la Poesía, amigos!
Imagen superior | Karen Cropper
En Papel en Blanco | Invitación a leer a Rubén Darío en el aniversario de su nacimiento